en el archipiélago /
textos de aquí
Gustavo E. MartÃnez Astorino
/ Poemas
hora tercia
agua vertida
copiosamente
sobre piedra
flecha disparada (todavía)
a la entraña ensangrentada
inmóvil
bajo la penumbra
escapas al velo partido
por primera vez
(ahí está el tronco de sándalo vivo
el llanto del niño en las callejas cercanas
la mueca del mendigo
y el pecho de la mujer ahuecado)
: no eres más que leche y necesidad
flecha disparada (todavía)
como lengua desanudándose
del sino
: no eres más que leche y necesidad
y vuelves a evitar el hocico de los perros
las raíces que van hacia las tumbas
:
sólo con el sesgo ajado de la manta
y un pezón henchido de especias
:
el zumo de la vida
es cierto
has pagado caro por el amor,
lo sabes
en aquella encrucijada inmoral
quisiste deshacerte de las derrotas pasadas,
todas estaban delante de tus ojos esa vez
junto a la inmundicia del abrevadero;
dios por un momento breve,
recibiste por ello el beso que da más sed
el semblante ignoto de la otra orilla;
nunca héroe
sólo comida para gusanos;
los mismos gusanos que merodean
en todas las hazañas del mundo
hasta tanto el empeño de tu cuerpo
creíste que los pechos turgentes
serían para ti esta vez
y te colgaste de un sueño inmortal;
pero no, el corte más codiciado
va siempre tras la codicia de lo que vendrá
dios por un momento breve,
llevas el lastre de quien no volverá a tierra
ni alcanzará la mañana
gloria falsa de los aduladores de turno:
verán tus huesos convertirse en polvo
hasta tanto el empeño de tu alma
pensaste que la piel almendrada
sería tuya otra vez y, con ella, los violines de la tarde,
el espasmo frágil, la caricia de la leva,
hasta el mismo hálito de su deseo;
dios por un momento breve,
el jugo de la manzana se deshace en su boca
sin alcanzarla jamás
nunca habéis perdido tanto por tan poco
gusanos que consumen
la espiral y la curva de los días venideros
ahí-ya-tus-huellas
qué hay ahí
(dices)
en esa penumbra
entre alborada
en ese pie de viento rasgando
el huso de la carne
:
rutinas del cuidado efímero
qué hay
de ese pacto esquivo y reflejo
que ya no adviertes siquiera
en las tres esquinas del vidrio
qué hay del mosto y del licor
y aun de las emanaciones
si no adviertes siquiera
la modalidad de la presencia
en derredor
qué hay de la alborada
y de la agitación de un diamante
si ya no la adviertes, tan cercana
qué hay ahí
(dices)
en esa penumbra demorada
¿qué hay?
:
la puerta de vidrio se abrió
y las manecillas desquiciadas alcanzaron la desnudez
cerca de los hombros
:
el frío de otra intemperie más sutil e insidiosa
alargó el hocico hasta el vacío de piedra
un estrépito en la bocacalle los conmina
pero es ciego el veneno azul
:
Desde la torre,
a una distancia de aire dorsal
el ojo que ya no adviertes
divisa
el garabato de una inscripción,
y aunque (hablas) de pacto
tus ojos no fulguran con los conocidos destellos
(hablas) de horizonte intempestivo
y te recuestas en la red filosa de su credo
qué hay
entre aquella penumbra todavía vacilante
y esta alborada ya resuelta
qué hay si ya no adviertes que hay más
ahí
embrión
escóndete detrás de los escaparates
ya viene
EL
con el cetro ajado del fuego
sobre sus hombros
viene
sin nombradía ni pedestal
en medio de turbulencias y largas lluvias
viene
sigiloso
en las manos sedientas del ángel
no sé dónde
pero
abre los cerrojos
y alumbra el ventanal
hacia otro margen
:
herido por un diente inusitado en las entrañas
con un tercio de hojas en su costado
solo en el embrión de la mañana
condenado a vagar en los despojos del viento
sin alcanzar jamás la alborada prometida
:
virgen con pétalo maduro
diadema fulgurante
en el exilio del desierto
:
entre melodías y chirridos
perdido por ofrecer parábolas sin costura lógica
qué podría significar un lirio o una camelia
entre las cenizas deflagradas del abismo
Gustavo E. MartÃnez Astorino
Gustavo E. Martínez Astorino. Nació en La Plata en 1969 donde reside. Es profesor (1997) y licenciado en letras (2003) por la Universidad Nacional de La Plata. Ha publicado Pájaro-lira, 2000 (Tierra Firme) y Trazas de limo, 2003 (Vinciguerra) en el género poesía y Alegoría y tardo-modernidad: una lectura alegórica de la poesía de Horacio Castillo, 2005 (Dunken), en el género ensayo. Integra con obras de su autoría el libro Colección de autores contemporáneos. Figura en la antología denominada Poesía 36 autores, junto a otros poetas platenses, 1999 y en la Historia de la literatura de La Plata, publicada en el año 2001. Ha publicado una entrevista al poeta y traductor del griego moderno Horacio Castillo intitulada “Horacio Castillo: una poética atemporal y desterritorializada”, en la revista Poesía de Venezuela 2001. La Academia Argentina de Letras publicó en el libro homenaje al académico de número Horacio Castillo el texto intitulado: “Acerca de lo neutro en Mandala de Horacio Castillo”. Actualmente escribe el libro Conversaciones con Horacio Castillo (1997-2010) que reúne el material inédito fruto de su amistad y trabajo intelectual con el poeta, ensayista y traductor del griego moderno Horacio Castillo (1934-2010). Dirige junto a María Cecilia ROSSI el departamento de arte del Centro Creativo de Expresión y Movimiento de la ciudad de La Plata. Allí promueve el proyecto: Educación a través del arte 2005-2013 (multidisciplinario) y una colección artesanal de cuentos para niños. Investiga la problemática de la allegorie en tanto categoría de interpretación post-metafísica del arte, en general, de la literatura y de la poesía, en particular. En la actividad docente coordina talleres de escritura e interpretación de textos en varias instituciones de la ciudad y se desempeña como ayudante en la Cátedra de Teoría Literaria. (UNLP).